A tí te estoy hablando a tí, a tí el que no escucha, a tí que con lo que te sobra me darías la luz para encender los días. A tí que juegas a ganarme cuando sabes bien que lo he perdido todo, a tí te estoy hablando a tí aunque te importe poco lo que estoy diciendo. A tí te estoy hablando a tí, aunque es perder el tiempo. A tí que te paso tan lejos el rigor del llanto y la melancolía. Si nunca dije la verdad, fué porque la verdad siempre fué una mentira. A tí te estoy hablando a tí aunque te valga madre lo que estoy diciendo. A tí que te faltó el valor para pelear por tí, a tí que te consuelas con cubrirte de channel las huellas de mis besos. A tí ya no te queda nada, a tí ya no te queda nada. A tí que por despecho estas pensando con los pies, a tí que me dejastes solo incluso cuando estabas en mi compañía, a tí ya no te queda nada, a tí ya no te queda nada. A tí te estoy hablando a tí tan sordo y resignado, a tí que duermes con tu orgullo y te dejas tocar con tu recor barato.
.
.
.
.